El ruido y las nueces
La lentitud como método
Hace treinta años, al hervidero musical mexicano arribó un tempo lento, casi ominoso. La cumbia rebajada amenizó con más nostalgia que velocidad los festejos barriales y cautivó a toda una comunidad norteña que, atrapada por su parsimonia, transformó la cumbia latinoamericana. Una reciente compilación demuestra la vigencia de este género.
Una columna musical de Jaime Andrés Monsalve.
POR Jaime Andrés Monsalve

Juan Medina (izquierda) junto a su Sonido Maravilloso (1980).
ACERCA DEL AUTOR

Jefe musical de la Radio Nacional de Colombia. Autor de tres libros sobre tango y coautor de al menos doce más sobre jazz, rock, música clásica y otros géneros. Miembro del comité editorial de El Malpensante.